No se salieron de sus esquemas ni siquiera en el último minuto libre. Los seis postulantes presidenciales expusieron sus propuestas de campaña, mantuvieron algunos momentos -breves- de tensión y otros instantes de chicanas durante el primer debate en Santa Fe.
Con la Universidad Nacional del Litoral como sede, los aspirantes a la Casa Rosada cumplieron con la primera "posta" obligatoria de debates. La semana que viene, en la UBA, será el segundo y último encuentro antes de las elecciones del domingo 27.
Luego de enumerar sus propuestas, en el último segmento, en el que cada uno dispuso de un minuto para hablar, se vieron quizás las chicanas más fuertes. Mauricio Macri apuntó contra el kirchnerismo, y Alberto Fernández le achacó el estado en el que deja el país.
"Hemos visto que volvió el dedito acusador y la ‘canchereada’; el kirchnerismo no cambió. Sabemos que tenemos problemas pero volver al pasado no nos ayudará", expresó el jefe de Estado en los últimos segundos de su alocución. "Hoy tenemos otra cultura del poder, hemos modernizado a la argentina y hemos vuelto al mundo. Si tuvimos problemas económicos, lo podremos solucionar".
Para finalizar, sostuvo que una gestión no fue suficiente: "tres años y medio es poco tiempo para solucionar los problemas de décadas".
Alberto Fernández dedicó su último minuto para cargar contra la gestión macrista. "Más de 2.000 puntos de riesgo país y volvimos al mundo... qué raro lo que dice el Presidente. Otra vez nos endeudaron, otra vez cerraron empresas, otra vez la clase media cayó en la pobreza. Y nos hacen creer que cada 10 años tropezamos con la mima piedra. La piedra son ellos", arremetió el postulamnte del Frente de Todos.
"Nosotros somos un país de gente maravillosa. Yo creo que entre todos y todas vamos a volver a poner a la Argentina de pie. Yo sé que cuento con todos ustedes. Cuenten conmigo", prometió a modo de cierre.
El economista José Luis Espert, en tanto, se mostró emocionado, y se mostró informal al referirse a los televidentes. "Soy un ciudadano común como vos, sin experiencia polítcia previa, nunca fui funcionrio. La gente votó una falsa grieta, las medidas económicas de uno y otro gobierno fueron muy similares. El Gobienro de Cambiemos no pudo evitar que volviera el kircherismo. Nosotros sí podemos hacerlo", expuso.
Roberto Lavagna (Consenso Federal), propuso a la clase dirigente asumir el fracaso para empezar a crecer.
"Estamos mal y podríamos estar mucho mejor. Hay jóvenes y familias que se van del país. Ha llegado la hora de asumir los fracasos, es la clase política entera la que debe hacerlo", dijo el ex ministro de Economía.
El postulante del FIT, Nicolás del Caño, les habló a los jóvenes. "A esos millones que tienen empleos precarios, que no tienen derecho a casi nada. A los que ven peligrar sus estudios porque la plata en su familia no alcanza", expuso. Propuso reducir la jornada laboral.
Finalmente, Juan José Gómez Centurión dijo que no sólo hay que foco en los problemas económicos que atraviesa el país y fue el único de los candidatos que hizo una autocrítica a los dirigentes. "El fracaso no es político. La clase política abandonó los valores que alguna vez hicieron que este país sorprendiera al mundo", cerró.